Influencias morales de los rambleños de 1883
Dedicado el propietario a la dirección y gobierno de sus fincas, el bracero a sus labores y el artísta a su taller. Se suceden los años sin que nada consiga alterar la tranquilidad de su habitantes. La falta de ilustración en la clase baja, el cariño en la alta a las costumbres antiguas, cierto entusiasmo que todo sienten por su suelo. La estrecha unión dentro de un círculo de satisfacción en que todos se creen felices, y un carácter independiente y resignado, a la par que pacífico, se ajustan a vivir según los medios con que cada uno cuenta. De impresiones fugaces como nubes de verano, ni el placer ni el dolor les hacen grandes mellas, y no sienten por lo tanto duraderas afecciones. Viven al día, sin pensar en el mañana, y por una diversión olvidan sus pesares, siendo, en medio de todo, cariñosos y hospitalarios.
Con este modo de ser se compranderá que las influencias morales toman poca parte en la etilogía de las enfermedades, que la criminalidad figura en muy corta escala.
La longevidad está garantidaza, y como no es mi ´nimo hacer un estido fisico-psicologico por ser terreno resbaladizo, y por otra parte, de muy poca utilidad a nuestro objeto, con lo expuesto creo que basatará para formar idea de la moral de sus habitantes.
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